Lucha entre Salou y Vila-seca por PortAventura
El municipio de Salou reclama una parte superior de los tributos que genera PortAventura y rompe con el consorcio intermunicipal que formaba con el municipio de Vila-seca desde hace 20 años para gestionar todo lo relacionado con el parque temático. Un parque que se encuentra en terrenos de las dos localidades y reparte por mitades los impuestos que paga, unos 2 millones de euros anuales.
Salou considera que con el 70% de los terrenos del parque en su término municipal le corresponde la parte proporcional. El ayuntamiento salouense insta a Vila-seca y a la Generalitat a negociar un nuevo consorcio ahora que caducaba el actual. En 1992 los dos ayuntamientos decidieron ceder competencias en materia urbanística, fiscal y de gestión en favor del Consorcio. Además, este ente es quien recauda los impuestos del parque y los distribuye al 50% a los dos municipios.
Actualmente los impuestos que genera el parque se sitúan en unos 2 millones de euros pero en el futuro la cantidad podría ir aumentando hasta los 6 millones de euro cuando se desarrollen una zona comercial y residencial proyectada. Esta nueva área se situaría en un 60% en terrenos de Salou y generaría una buena cantidad de impuestos a los cuales ninguno de los dos municipios quiere renunciar.
El Grupo parlamentario de CIU tenía intención de prorrogar de manera indefinida estas condiciones y el ayuntamiento de Salou se ha adelantado a denunciar el consorcio dejándolo sin efecto y forzar así la negociación de un nuevo marco. El que era vigente hasta ahora se acordó hace dos décadas con un reparto igualitario de los ingresos para evitar tensiones que pusieran en peligro la construcción de PortAventura.
El parque temático se encuentra inmerso en la construcción de una nueva atracción, la montaña rusa Shambhala, la más alta de Europa -76 metros-. El parque ha anunciado que abrirá la temporada el 30 de marzo.