La pesca, apuesta turística del Pirineo de Lleida
La temporada de pesca en las aguas de alta montaña comenzó a mediados de mayo y se alargará hasta el 30 de septiembre, para pesca libre, y el 5 de noviembre, para la controlada intensiva. La práctica de esta disciplina deportiva es una importante apuesta turística para las comarcas del Pirineo de Lleida, sobre todo para el Pallars Sobirà, la Alta Ribagorça, la Val d’Aran, el Alt Urgell y el Solsonès.
Los pescadores están de suerte esta temporada, ya que el deshielo ha facilitado que el caudal de los ríos haya crecido de forma espectacular haciendo más atractiva la pesca deportiva. Además, este año se ha facilitado la afluencia de pescadores, ya que estos pueden comprar la licencia o permiso de pesca recreativa de manera presencial en el propio territorio, ya sea en cualquier oficina de los Servicios Territoriales o en las comarcales del Departamento de Agricultura, o bien dirigiéndose a los establecimientos de la zona como bares, restaurantes y hoteles, donde disponen de talonarios de pesca. Las solicitudes también podrán hacerse vía Internet en la Oficina Virtual de Trámites de la Generalitat.
En cuanto a la regulación de la pesca, entre las novedades más destacadas se encuentra la posibilidad de seguir pescando con muerte durante el mes de septiembre en aquellas zonas de pesca controlada en las que el plan técnico así lo prevea. Se establece un límite de capturas para la trucha común de cuatro ejemplares por pescador y día de un tamaño superior a los 22 cm en las zonas de pesca controlada de salmónidos.
El Pirineo de Lleida dispone de una amplia oferta de ríos y embalses para practicar la pesca que se encuentran dentro de la cuenca de los ríos Noguera Pallaresa, Noguera Ribagorçana, Segre y la Ribera Salada en las comarcas del Pallars Sobirà, el Pallars Jussà, la Alta Ribagorça, el Alt Urgell y el Solsonès. También hay tramos de régimen especial en Oliana, Alòs de Balaguer, Sant Llorenç de Montgai, Santa Anna, Canelles, Sant Antoni, Terradets y Rialb.
Uno de los lugares que tienen mayor afluencia de pescadores es el río Noguera Pallaresa, en la comarca del Pallars Sobirà. En 2007 las sociedades de pescadores de Rialp, Sort, Soriguera, Gerri de la Sal, La Pobla de Segur y Tremp crearon el Convenio Pallaresa para llevar a cabo una gestión conjunta para recuperar la trucha autóctona, dañada por las riadas de los años 1990. Se trata de hacer compatible la recuperación de esta especie de pez con la pesca deportiva, ofreciendo al pescador 40 km de río divididos en dos modalidades de cotos pescables, desde la confluencia del río Romadriu a la confluencia del río Flamisell.
En el Alt Urgell, el Club Caza y Pesca del Alt Urgell gestiona en el río Segre 34,9 km de pesca con muerte y 56,8 km de pesca sin muerte. Además, este año el río en Os de Civís pasa a ser de pesca libre sin muerte. En el Solsonès, la Ribera Salada, considerado un espacio de interés natural, ofrece parajes ideales para la práctica de la pesca. /Noticia emitida por el Patronato de Turismo de la Diputación de Lleida