La mitad de las bodegas de Catalunya están abiertas a los turistas

De las más de 900 bodegas que hay repartidas por el territorio catalán el 49% ofrece alguna actividad enoturística o al menos permite la visita a los turistas.

Un estudio de WINE TRAVEL OBSERVER (WTO) ha contado hasta 918 bodegas elaboradoras activas en Cataluña de las que la mitad son visitables. Lo que significa que anuncia visitas en su página web, redes sociales o forma parte de las bodegas visitables de la Ruta del Vino. Las 451 bodegas localizadas que son visitables han ofrecido 1.683 experiencias de enoturismo diferentes durante el 2023.

Las bodegas son claves en la oferta de enoturismo y están repartidas por toda Cataluña. Pero según WTO el enoturismo no termina en la bodega, a partir de aquí “los territorios se nutren de otros actores importantes, como los restaurantes, los alojamientos, los bares de vinos, las tiendas de vinos, los espacios de interés (como museos del vino o centro de interpretación), y los servicios turísticos.”

WTO es un proyecto ideado en la Escuela de Enoturismo de Cataluña que busca aportar valor a la actividad enológica y turística. Para este Observatorio, para hacer enoturismo es necesario fijarse en las zonas vinícolas tradicionales que están marcadas por la influencia de los mapas de las Denominaciones de Origen. Sin embargo, «cada vez hay más bodegas fuera de la DO que cultivan vinos y ofrecen visitas en nuevas zonas», dice WTO.