La línea Venecia: pagar para entrar

Finalmente, la ciudad de los canales ha tomado la medida que venía anunciando y posponiendo desde hace más de un año. Sienta un precedente inaudito que abre un camino a los destinos que sufren una elevada concentración de visitantes y quieren evitar la masificación.

A partir del 16 de enero, los turistas deberán reservar y pagar para poder acceder a Venecia. El Ayuntamiento quiere regular la masificación turística que sufre la ciudad delimitando un número máximo de visitantes.

El municipio también fue pionero en el control de los flujos turísticos. Hace casi tres años anunciaba un sistema de cámaras y sensores distribuidos por los espacios turísticos que detectan en tiempo real el número de personas, el tiempo que pasan en cada punto estratégico, cómo se mueven y si se trata de personas que se mueven por la ciudad de forma habitual o son turistas. Toda esta información es de ayuda para los responsables municipales a la hora de ordenar los flujos de visitantes.

Ahora se suma la medida más drástica: una tasa de acceso cuyo precio irá de los 3 a los 10 euros por persona. La entrada se podrá comprar por internet y variará su importe según la antelación con la que se adquiera y dependiendo del número de turistas que vayan reservando para el día concreto.

Un detalle importante es que los que pernocten en hoteles del interior de la isla quedarán exentos de reservar la entrada porque ya sufragan la tasa del alojamiento. Esta ciudad italiana, Patrimonio de la Humanidad, muy limitada de superficie y con una movilidad complicada por sus canales, recibe entre 5 y 6 millones de turistas cada año. Con la limitación del número máximo de personas diarias esperan que la gestión de los flujos turísticos mejore.