Eurovegas:¿por qué hacer inventos cuando el modelo funciona?
A pocas semanas de conocer el futuro del complejo Eurovegas, Marcel Forns, escribe este post dejando tres consideraciones en clave turística para la reflexión.
Barcelona es un modelo de éxito. Desde un punto de vista turístico la ciudad es un ejemplo permanente dentro y fuera de nuestras fronteras, tanto por lo que respecta a visitantes individuales como al turismo de reuniones y congresos.
Esto no pasa porque sí; sencillamente se ha hecho un buen trabajo y Barcelona con cerca de 7,5 millones de turistas e n 2011, lleva ya años entre las 3 primeras ciudades mundiales en número de congresos internacionales, por delante de París, Berlín o Singapur (según ICCA International Congress and Convention Association).
Barcelona se ha consolidado cono un referente mundial en su ámbito y ha sido por mérito propio. Por ello, no nos debería sorprender que Barcelona tenga pretendientes.
No es mi intención hablar del modelo de juego implícito, ni del modelo urbanístico del proyecto Eurovegas, porque ya lo han hecho otros, incluso el propio Gobierno. Por el contrario, querría hacer algunas reflexiones sobre el proyecto, desde una vertiente estrictamente turística, como del juego nadie quiere oir hablar, el proyecto Eurovegas se ha vendido fundamentalmente como un complejo de congresos y grandes reuniones, con una amplia oferta hotelera, orientada a la captación de cerca de 4,7 millones de nuevos turistas.
Sobre este punto se pueden hacer muchas consideraciones. Yo sólo quiero hacer tres:
1 . No es ningún secreto, que en los últimos años, el número de congresos, en general ha bajado, del mismo modo que ha bajado el número medio de congresistas.
Es normal, de una parte la situación de crisis ha hecho revisar las políticas de muchas empresas y organizaciones, de forma que las dimensiones de los congresos y reuniones se han reducido, del mismo modo que ha tendido a reducirse la duración. Como resultado, menos gasto.
De otra parte, nos ha crecido la competencia. La lucha entre las diferentes ciudades por la captación de congresos y acontecimientos de todas las dimensiones es hoy mucho más feroz.
Barcelona dispone de una excelente planta hotelera y de unos espléndidos equipamientos para recibir congresos y reuniones, y por eso es por lo que compite de forma eficiente en la primera división mundial del sector de los viajes. Aun así, a pesar de ser uno de los destinos de referencia, los precios y las ocupaciones medias de la ciudad se sitúan por debajo de buena parte de las capitales con las que competimos, según el último estudio de ESADE. Si tenemos en cuenta que sólo este año la oferta hotelera de la capital catalana crecerá en once nuevos hoteles y que vendrán más en el futuro, es evidente que Barcelona deberá continuar trabajan para generar altas ocupaciones y mantener las rentabilidades medias de sus establecimientos, en un escenario competitivo más duro.
¿Qué pasará cuando la oferta hotelera de la ciudad crezca un 54% por encima del su volumen actual como consecuencia de los nuevos establecimientos del complejo Eurovegas? Desde el Gremio de Hoteleros de Barcelona se ha comparado Eurovegas con el caso de Eurodisney en Paris. No hay nada a comparar, Eurodisney cuenta con 5.800 plazas hoteleras y si estiramos mucho llegaríamos a 8.000 en toda su zona de influencia inmediata. Del proyecto Eurovegas hemos leído que se han previsto un total de 15.000 nuevas plazas (algunas fuentes hablan de hasta 36.000 plazas) ¿Somos capaces de hacer crecer la demanda en las mismas proporciones? Si no somos capaces la respuesta es clara, sólo hace falta mirar a nuestro alrededor para ver qué sucede con sectores con un exceso de oferta y que compite exclusivamente en precio.
2 . Hasta ahora la estrategia de desarrollo y de promoción de la ciudad (y en buena parte también de su territorio adyacente), se ha realizado desde organizaciones competentes, con presencia y participación pública y privada. Y es bien cierto que se ha hecho bien. A diferencia de otros destinos turísticos, donde el posicionamiento e imagen de la zona la han marcado los turoperadores o terceros ajenos al territorio, Barcelona ha podido crear por ella misma una imagen de destino turístico atractivo y coherente, que es sin duda la imagen más potente que tenemos en Cataluña. Este trabajo se ha hecho fundamentalmente desde el consenso.
Es previsible que Eurovegas marque estilo y políticas propias en materia de promoción. Es legítimo y es lógico, porque tiene capacidad por hacerlo. Pero Eurovegas no es ni una cadena hotelera ni un mero complejo; es más bien un destino per se, que si se instala en Barcelona querrá hacer uso del nombre y de la marca de la ciudad. ¿Puede un proyecto de las dimensiones de Eurovegas acabar transformando el posicionamiento y la imagen de la marca Barcelona? ¿En qué medida?
3 . Para acabar quiero recordar que hace dos días nos estábamos planteando cual era la capacidad de carga de Barcelona (en el marco de un Plan Estratégico con el horizonte fijado en el 2015). ¿Es compatible Eurovegas con el modelo de desarrollo de la ciudad? ¿Encaja en el modelo turístico de Cataluña en los términos en los que se ha planteado?
Personalmente creo que por el momento Barcelona se ha desarrollado bastante bien. Organismos como Turismo de Barcelona y su Convention Bureau han llevado a cabo una buena tarea. Estoy convencido que Barcelona puede continuar creciendo en volumen de pernoctaciones y en captación de visitantes, pero me gustaría pensar que lo hará de forma coherente, evolucionando sobre ella misma y no transformando su alma.
A pesar de todo lo que se pueda decir, el modelo turístico en Barcelona funciona; el turismo en general es junto con las exportaciones de las pocas cosas que nos funcionan. ¡Y no es fruto del azar! Entonces, ¿es necesario que hagamos inventos ahora, cuando todo indica que la estrategia que llevábamos era correcta?
Marcel Forns Bernhardt