El retraso del Brexit da un respiro a la temporada turística de verano
La extensión de seis meses que ha otorgado la Unión Europea al Reino Unido para materializar el Brexit es una buena noticia para la industria turística ya que permite salvar la temporada de verano.
Retrasar hasta el 31 de octubre da garantías a los turistas británicos a la hora de planificar sus viajes. Durante estos meses el turismo no sufrirá alteraciones. Tanto las compañías aéreas y de transporte en pasajeros en general como las agencias de viajes que hacen tareas de intermediación pueden trabajar tranquilas. Nada cambia a corto plazo y se espera que las reservas para este periodo no se vean alteradas.
Un escenario bien diferente se dibujaba con una salida sin acuerdo. La incertidumbre era total. Aunque la nueva fecha solo supone un respiro ha servido para calmar los ánimos en una atmósfera de caos generada por los políticos británicos. En otoño, a las puertas de la nueva negociación de la próxima temporada turística, será otra cosa.
El sector espera que los gobiernos y parlamentarios aprovechen este margen de tiempo adicional para encontrar una solución. Ha empezado una nueva cuenta atrás. Como informamos en Comunicatur en anteriores noticias, el Brexit sí afectará al turismo. Una salida de la UE provocará una caída de la libra esterlina y un descenso del PIB del Reino Unido. Con este retroceso económico el mercado emisor de turismo se resentirá con total seguridad. Las consecuencias las conoceremos en 2020.
