El combustible SAF no alcanza ni el 0,5% de las necesidades de la aviación
Pese a que la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) anuncia que este año la producción de combustible sostenible SAF se triplicará, el volumen es totalmente irrisorio.
IATA prevé una producción de 1.900 millones de litros (1,5 millones de toneladas) en 2024. Esta cantidad supone el 0,53% de las necesidades globales de combustible de la aviación mundial.
El sector aeronáutico tiene como reto alcanzar las emisiones netas de carbono en 2050. Una de las vías más importantes por las que apuesta la aviación es la de este combustible identificado como sostenible. La IATA explica que el SAF proporcionará alrededor del 65% de la reducción de carbono que necesitan las compañías aéreas para lograr el reto de cero emisiones en veintiséis años.
En 2024 se triplicará la producción de este combustible respecto al 2023 pero queda mucho camino por recorrer. En cinco o seis años se habrán implementado entre 100 y 150 nuevos proyectos para producir combustible renovable dirigido a la aviación. La previsión es que en 2030 produzcan hasta 50 toneladas de combustible sostenible, que con los cálculos de consumo actual aportaría un 9% de la necesidad de carburante.
Los datos son insuficientes, están lejos del objetivo de 2050. Las compañías aéreas necesitan poder adquirir SAF en más cantidades si realmente se apuesta por este tipo de combustible. Un combustible que, por otro parte, está cuestionado. El camino apunta a más hacia nueva tecnología y aviones más eficientes.
