El Índice UAB de Actividad Turística del 2014 apunta a un incremento del 4,3% del número de visitantes respecto a 2013 gracias, en parte, a la mejora de la demanda de los países del norte de Europa. Este año, visitarán Cataluña 16,2 millones de turistas y harán un gasto un 7,9% mayor que el año pasado. Se consolida así la tendencia creciente de los últimos tres años. En el conjunto del Estado, la evolución será muy similar, con un 4,9% más de turistas extranjeros y un gasto un 7,7% superior. El informe de este año incluye un apartado que se ocupa específicamente del impacto del «turismo del juego», que señala que los efectos económicos y sociales son más positivos si las inversiones en el sector del juego se vinculan a la potenciación de zonas turísticas.
Según la previsión de la UAB, gracias a una mejor situación económica, todos los mercados emisores vivirán un crecimiento del número de turistas y del número de pernoctaciones; además, salvo algunas excepciones, aumentarán la demanda hotelera, el número de pernoctaciones y el gasto (globalmente y por turista). A diferencia de 2013, los incrementos más significativos se registrarán entre algunos mercados tradicionales (países de la Unión Europea), mientras que los mercados emergentes (europeos del este, asiáticos y americanos principalmente) seguirán creciendo pero lo harán a un ritmo menos pronunciado que el año pasado.
Tres mercados tradicionales del norte de Europa destacan por sus buenos resultados. Los turistas del Reino Unido aumentarán un 9%, harán un 12% más de pernoctaciones hoteleras y un gasto total de un 9,5% más que en 2013. Respecto a los alemanes, aumentarán un 5,1%, harán un 6,8% más de pernoctaciones e incrementarán un 5,5% el gasto. Y los turistas de los países nórdicos crecerán un 7%, alcanzando un máximo histórico de 804.000 visitantes; además, harán un 9,2% más de pernoctaciones y su gasto total se incrementará un 16,1%, más que ningún otro mercado (con un significativo aumento también del gasto por turista: 8,6%).
Por otra parte, Francia vivirá un incremento del 3,2% del número de visitantes, muy destacable porque se trata del principal mercado emisor de turistas en Cataluña (con más de cuatro millones de visitantes, supone el 26,6% de la demanda). Además, experimentará un incremento importante del gasto total (13,2%) y del gasto por turista (9,7%, el aumento más pronunciado de este año).
El mercado italiano, que el año pasado registró cifras decrecientes y se ha mostrado fuertemente afectado por la crisis económica y de confianza, vivirá en 2014 un año de recuperación: vendrá un 1,9% más de turistas transalpinos y harán un 2,5% más de pernoctaciones. No obstante, el gasto se reducirá un 4,7% y bajará también el gasto por turista italiano en un 6,5%.
Cabe destacar finalmente que los turistas procedentes del resto del mundo —donde se encuentran aglutinados los mercados emergentes— crecerán un 3,9%, un aumento menos pronunciado que el de 2013. Esto puede explicarse por la ralentización de mercados como el ruso, que había crecido a gran ritmo durante los últimos años. Con más perspectiva, sin embargo, hay que recordar que este grupo de turistas ha crecido un 58% desde 2009, frente al 16% de incremento que han registrado los mercados tradicionales durante el mismo periodo.
Dinámica laboral y estacionalidad
El Índice UAB de Actividad Turística estudia en un anexo el papel del sector en la economía catalana durante el periodo 2009-2013, en comparación con el resto de sectores en un periodo de intensa destrucción neta de empleo y de alza elevada en los registros de paro.
Los resultados indican que los subsectores turísticos han tenido un comportamiento mejor que la economía catalana en general desde 2009: ha aumentado en neto las cifras de cotizantes a la seguridad social, actuando como «tabla de salvación» del mercado laboral catalán en cuanto a número de efectivos laborales. Sin embargo, este incremento se ha producido a costa de un aumento en la variabilidad temporal en el número de cotizantes.
Precisamente, otro anexo del informe se ocupa de la estacionalidad del sector, es decir, de la concentración de la demanda en determinadas épocas del año. Analizando la demanda hotelera, el Índice establece una relación entre el aumento de la estacionalidad del turismo en Cataluña con el papel preponderante del turismo extranjero, que ha ganado peso en los últimos años mientras que la recesión ha tenido consecuencias en las pernoctaciones del mercado nacional, que es menos estacional.
El Índice concluye, pues, que la estrategia de reducción de la estacionalidad pasaría por un aumento en el peso del mercado nacional y por activar políticas de reducción de la estacionalidad del mercado extranjero, particularmente en zonas como la Costa Dorada.
Recomendaciones
El Índice UAB de Actividad Turística 2014 apunta algunas prioridades que debería marcar el sector de cara al futuro. Hay, por ejemplo, que avanzar en la distribución temporal de los flujos para que, si el aumento de los indicadores (número de turistas, gasto, etc.) sigue situándose en los meses o semanas centrales del año, no será sostenible. Urge, pues, una estrategia integral de destinos, productos, precios y mercados.
En este sentido, el análisis concluye que conviene atraer a Cataluña visitantes que no vienen habitualmente, que no consumen el turismo de «sol y playa», sobre todo en temporada baja. En este sentido, las políticas de promoción pública y privada deberían dirigirse con este objetivo a los mercados emergentes.
No es necesario, por ello, descuidar los tradicionales: el Índice recomienda también dar impulsos diferenciales a mercados como el británico que, históricamente, demuestran ciertas dificultades de crecimiento.
Se recomienda también hacer frente a la concentración territorial de la actividad turística, aprovechando la atracción de Barcelona para desarrollar flujos hacia otras partes del territorio e impulsar el turismo itinerante, los productos integrados, etc.
