Cambio climático: más desestacionalización pero más competencia
En las próximas décadas, el cambio climático contribuirá a acercarnos a la tan ansiada desestacionalización del turismo en España más allá de los meses de julio y agosto, pero también tendrá un efecto negativo: habrá mayor competencia de destinos que ofrezcan sol y playa (principal atractivo de España), incluso entre los países nórdicos.
Estas son las principales conclusiones de un estudio de la Fundación Empresa y Clima (Fec), en cuya presentación su directora, Elvira Carles, señaló que se alargará la temporada “alta” en destinos del mediterráneo hasta los 10 meses anuales. Esa ampliación de los periodos de bonanza climática no tiene porque ir unido a un incremento del número de turistas. De hecho, los responsables del estudio estiman que se mantendrán los turistas pero que se distribuirán en el tiempo.
Carles señaló también que el incremento de las temperaturas en la costa mediterránea oriental provocará una flujo hacia el norte, hacia zonas como el litoral cantábrico y gallego.
Donde sí habrá una incidencia mayor será en el turismo de montaña y más concretamente del de nieve, ya que la moderación del frío invernal y el descenso de la precipitaciones -en un 10% en las próximas décadas hasta mediados de siglo- provocará que “las pistas de las cotas más bajas deberán trasladarse o reorientar su oferta”, según el catedrático de Geografía Física de la Universitat de Barcelona (UB), Javier Martín.
Martín insta a los empresarios turísticos a iniciar un proceso de «mitigación y adaptación» a este cambio mediante construcciones sostenibles, un mayor aprovechamiento de los recursos y generalizar el uso de las energías renovables, entre otras medidas. Elvira Carles destaca la creciente concienciación del sector empresarial y sus esfuerzos por iniciar un proceso de cambio que, según sus palabras, “algunos ya han empezado” Comunicatur/Ag. EP