Alquilar el jardín de casa a un campista, la nueva oferta de las plataformas
Las plataformas digitales de alquiler turístico están ampliando las posibilidades de negocio. Ahora han entrado en el mundo del camping. Cualquier espacio es susceptible de alquilarse para instalar una tienda de campaña o una autocaravana.
La llamada economía colaborativa abre la puerta a esta nueva fórmula que algunos turistas están utilizando como alternativa a la oferta tradicional. ‘gamping’ o ‘garden sharing’ son las Airbnb de los jardines particulares dedicados al alquiler turístico. También permite alquilar espacios en entornos naturales particulares como viñedos, plantaciones de cultivo o granjas.
Estas plataformas alquilan una superficie para instalar las caravanas o las tiendas de campaña y en muchos casos ofrece hasta servicios extra como piscina, cocina u otro tipo de instalaciones. La sofisticación del negocio es total. Evidentemente entre estos servicios no puede faltar el wifi.
El negocio ha ido evolucionando hasta el punto que muchos de los propietarios de los jardines facilitan a los turistas la tienda de acampada y ofrecen servicio de desayuno y comida. Una suerte de camping en pequeño formato de particulares que ingresan un dinero replicando una actividad legalizada que cumple una buena cantidad de normativas. En algunas regiones italianas las autoridades han empezado a regular esta práctica como una fórmula de turismo sostenible y responsable.
Sus defensores utilizan los mismos argumentos que utiliza Airbnb: permite el contacto entre el turista y el anfitrión local con el que conocer mejor la realidad del destino. A la vez que los propietarios particulares pueden ganar un dinero extra.